Y Zapata Sigue Cabalgando: un cuento sobre la vida del caudillo

Cuando se nos cuenta la historia de nuestro país –sea cual sea– lo pensamos como algo que le pasó a otras personas, en otra vida, algo lejano, no sólo en el tiempo sino en el espacio. Pareciera, en ocasiones, algo que nunca sucedió. Porque es normal que cueste imaginar cómo era el mundo antes de como nosotros lo conocimos; incluso cuesta conectar nuestro propio presente con nuestro propio pasado, porque mucho –sino es que todo– ha cambiado a como lo recordamos en la infancia. De ahí la importancia –y la necesidad humana por dejar un paso de su existencia tras de sí– de contar historias, de buscar prevalecer. Es algo natural. En muchos pueblos de México la costumbre de pasar la historia, las costumbres y tradiciones de boca en boca, es algo que se mantiene.

En una historia mal contada, todos podemos ser “el malo”, así como cuando contemos nuestra versión, siempre seremos “el bueno”. Sin embargo, independientemente de ser “el bueno” o “el malo” –que viene a ser algo tan subjetivo– lo cierto es que la historia escrita en los libros está retratada desde la perspectiva de los vencedores. Conocer otras perspectivas de un hecho se vuelve complicado cuando se le tiene que preguntar a los muertos. Preguntarle a Emiliano Zapata cómo fue la revolución resulta algo imposible (aunque sería maravilloso escucharlo), por ello hoy en día se ha convertido en nada más y nada menos que un símbolo. El legado ideológico que dejó es tan poderoso que tras más de 110 años su lema Tierra y libertad sigue siendo el grito de lucha de quienes en la actualidad se siguen rebelando ante un sistema que los somete.

Para todos aquellos que han tenido interés en adentrarse más en la historia, en buscar y escarbar más allá de lo que ofrecen los libros de las escuelas públicas, han encontrado que el caudillo del sur era más que sólo un hombre interesado en el poder. Cuentan que cuando llegó a sentarse en la silla presidencial –sin buscar ostentar ningún tipo de título– le dijo a Francisco Villa, sentado a su lado: “¿Y por esto se pelean?”. Pero eso bien podría ser sólo una leyenda urbana. Lo que nos ofrece este título es algo mucho más genuino y real: es la historia de alguien que estuvo ahí, un hombre que en su juventud fue zapatista.

Y Zapata sigue cabalgando es un cuento breve dirigido en especial al público infantil, escrito por Victor Hugo Sánchez Reséndizy editado por La Cartonera. La narración es sencilla, pero es capaz de atrapar desde la primera página debido a su autenticidad, temática y pasión. Sánchez Reséndiz recupera la historia de su abuelo, quien le contaba a los niños que se acercaban a preguntarle cómo fue pelear al lado de Zapata, los motivos por los cuáles lo hacían, cómo era la vida antes y cómo fue después de la revolución mexicana. Les cuenta además, sobre el verdadero destino que tomó el caudillo y cómo es que no fue asesinado como dice la Historia, sino que se fue a Arabia, porque va a volver a luchar por la libertad. Todo esto es lo que le brinda la belleza al cuento, los aspectos íntimos, los momentos exagerados por el bien del relato, el orgullo con el que es contado.

Aunque cada vez más lejano, el pasado es algo que determina nuestra existencia. Es necesario poder reconciliarnos con el pasado que tenemos como nación, honrar nuestro origen y hacer las paces con los episodios oscuros que cayeron –como caen para todos– en nuestro país. Cuando podamos hacer eso, podremos dejar el pasado en su lugar y mirar hacia el mañana. Y considero necesario aclarar que dejar el pasado atrás no es olvidarlo, al contrario: es reconocerlo. Y en el reconocerlo está rescatar relatos como éste, que son valiosos por ser parte del cotidiano; porque el mundo no ha sido construido sólo por los nombres que aparecen en los libros, sino por todas personas que los acompañaron, como el abuelo de Sánchez Reséndiz. Este título está lleno de nostalgia, de tiernas descripciones sobre Morelos y su gente, pero especialmente de tradición.

Inkitt: BbyKevs

Wattpad: @SugoiKevs

TikTok: @bbykevs

Arts Bazar Junio 2024: Un Encuentro Creativo en la Casa Universitaria del Libro

La Casa Universitaria del Libro (CASUL) abrió sus puertas el sábado 29 de junio para celebrar una edición más de Arts Bazar. Este evento destacó no solo por la cantidad de propuestas, sino también por la calidad de las creaciones en cómicsfanfics ilustradoscopicsfanzinesnovelas gráficas e ilustraciones impresas en serigrafíasrisografías y pósters con diferentes acabados: matebrillante y holográfico. Además, se presentaron objetos como tazaslapicerospinestarjetas coleccionables y muchos artículos más. Un plus de este evento es que, en la mayoría de los casos, los artistas y creadores de las obras eran los mismos expositores, ofreciendo la oportunidad de preguntarles más sobre las piezas y trabajos que mostraban.

La CASUL, ubicada en la Roma Norte, en la calle de Orizaba, organiza eventos, cursos, talleres y otros tipos de actividades abiertas al público. Al tratarse de una casa colonial con pisos de madera, techos altos y ventanales, el contraste con el Arts Bazar era notorio, creando una atmósfera armoniosa donde lo antiguo se mezclaba con lo novedoso. Alrededor de tres salas, dos de ellas circulares, se acomodaron las mesas, resultando en una exposición redonda que invitaba a ver todas las mesas para poder entrar y salir. Además, se contó con un podio para presentaciones de novelas gráficas, como “Regueiras” de Eterno Femenino Editorial; charlas como “Las perspectivas y desafíos de la autopublicación de cómics en México” por Virus Visal y “Proceso creativo de proyecto La importancia de ser mexicano” por Ric Velasco; así como talleres y presentaciones de nuevos proyectos editoriales.

Decomixado Comic & Toy Store es una de las tiendas de cómics más importantes gracias a su amplio catálogo que abarca no solo nuevos títulos sino también coleccionables raros y descontinuados. Estuvo presente con una amplia gama de cómics, algunos incluso en cámaras de protección de acrílico, considerados por los coleccionistas como objetos de colección. Sharkius llevó cómics y novelas gráficas para todas las edades con temáticas diversas como historias de superhéroes –como el cómic mexicano independiente “Códices infinitos”–, tiras cómicas, amor LGBT+ e incluso la historia de un par de hermanos que realizan exploración urbana y desaparecen tras entrar en una cueva de donde se presume que 100 años antes salió una bruja para atemorizar al pueblo que ahí habitaba, historia que se puede encontrar en “Sábado negro” de Tiras sin Sentido.

Por otro lado, Asfalto presentó una serie de novelas gráficas y fanzines con temáticas más oscuras que dejan ver una perspectiva de lo que bien podría ser un mundo postapocalíptico y sombrío, con figuras humanoides. En el mismo sentido de lo postapocalíptico, el trabajo de Joshua Hernández en “Ecatepunk” retoma la película “Mad Max” y a los punks para contar una historia de lo que pasaría después de la casi extinción de la humanidad, y que, pese a ello, ciertas condiciones sociales, desigualdades y violencias se mantendrían pues son inherentes a la humanidad. Arturo Piña también explora cuestiones retorcidas del ser humano en varios de sus fanzines como “Mente D’Mente” y “La taxidermista”, donde, sin importar que la situación sea aparentemente inofensiva, la muerte sigue allí acechando. En contraparte a estos trabajos, Gnomariana llevó los dos tomos de su serie de tiras cómicas “Red flags” que retratan pequeños momentos de las relaciones amorosas modernas, mientras que Dacachi expuso tres de sus novelas gráficas, las cuales contaban con bellas ilustraciones de las cuales se podían comprar individualmente sets de tarjetas coleccionables.

Arts Bazar reunió a una serie de artistas muy diversa, demostrando que la creatividad no tiene límites y que habita de formas distintas en cada uno de nosotros. El hecho de presentarse en CASUL es un extra, pues es un buen pretexto para visitar la colonia Roma Norte en un fin de semana. Indudablemente, para asistir hay que considerar una buena parte del día, pues merece totalmente la pena echar un vistazo a todas las mesas.

Inkitt: BbyKevs

Wattpad: @SugoiKevs

TikTok: @bbykevs

UNAM y el Cine: Impacto y Futuro en el FIC 2024

Pensar en el cine en México siempre nos remite a la época del Cine de Oro y, en los últimos tiempos, a la triada que han formado Alfonso CuarónGuillermo del Toro y Alejandro González Iñárritu en el cine –especialmente en el extranjero–. Habrá que partir marcando una línea entre el cine mexicano, el cine en México y los mexicanos que hacen cine en el extranjero –porque podría parecer lo mismo, pero no lo es–. Sin embargo, pese a sus diferencias, lo que queda claro es que en la actualidad se ha dado más peso a esta parte de las artes en el país y que no sólo se han puesto en la mira a las producciones nacionales, sino también a las escuelas de cine y a los jóvenes creadores –que no son pocos y que, sin lugar a dudas, están buscando encontrar su identidad como cineastas y crear sus propuestas originales—.

Es en este contexto que la Universidad Nacional Autónoma de México organizó un año más el Festival Internacional de Cine celebrado del 13 de junio al 30 de junio teniendo como sede principal el Centro Cultural Universitario. Este festival se ha presentado desde el 2011 y fue concebido originalmente como un evento de promoción del cine contemporáneo internacional y mexicano, considerado ahora como uno de los festivales más influyentes de la Ciudad de México y del país en cine de arte. Cada año ha conseguido no sólo más asistentes y cobertura, sino también más actividades, como las que se realizaron en esta edición, la cual contó con la proyección de películascátedrasconversatoriosperformanceshomenajes a figuras de la cinematografía mundial y encuentros de cine con diversas categorías y convocatorias abiertas al público en general, sumando con esto una ceremonia de premiación.

Además, en el CCU se instaló además un stand de libros UNAM con una selección de obras que iba desde algunas novedades a títulos que forman parte de su catálogo desde hace varios años, siendo principalmente categorías como músicateatrocine y literatura los que dominaban los libreros. Alguien camina sobre tu tumba de Mariana Enríquez era uno de los títulos más llamativos no sólo por su colorida portada, sino también por ser una edición actualizada que incluye nuevos relatos de cementerios del mundo a los cuales acude la autora. Asimismo se podía encontrar “El lejano Oriente de la poesía mexicana, que hace una selección de poesía mexicana inspirada en los países de Oriente y su cultura. También estaban exhibidos los volúmenes de “El Ensayo”, los cuales son un compendio de ensayos mexicanos que buscan darle peso y enaltecer su valor como género literario, bajo la premisa de que en México suele dejarse de lado.

Al igual que el año anterior, se llevó a cabo, en colaboración con el Festival de Cine de Locarno, el Locarno Industry Academy México; este taller está dirigido a jóvenes de México y Latinoamérica que buscan mantener la circulación de cine independiente y todo lo que conlleva: distribución –en línea y tradicional–, ventasmarketingexhibiciónprogramación de festivales y otros aspectos técnicos. Se convocaron también a estudiantes de bachilleratolicenciaturaposgrado y público en general a escribir un ensayo para el Concurso de Crítica Cinematográfica Alfonso Reyes “Fósforo” sobre una película seleccionada por FIC UNAM.

Es precisamente en ese punto donde recae el propósito de este evento: compartir el cine. Compartirlo en todos sus aspectos: llevarlo a otros lugares, verlo con otras personas, comentarlo, discutirlo y experimentar otras perspectivas del cine. Es interesante ver que la mayoría de estos talleres y cátedras están dirigidas a jóvenes, y que en la mayoría de la asistencia a las proyecciones también es por parte de ellos, buscando quizás un tipo de películas que no se consiguen en los cines convencionales o al que no se puede acceder debido a su poca distribución. Sea como fuere, esta gran edición abre la expectación por lo que se presente el próximo año, ya que será la celebración de los XV años del proyecto.

Inkitt: BbyKevs

Wattpad: @SugoiKevs

TikTok: @bbykevs

Coyoacán se viste de cultura: todo sobre la Feria Internacional del Libro 2024

El centro de Coyoacán es un lugar emblemático de la Ciudad de México. Caminar por sus calles empedradas, conocer sus callejones y calles angostas, disfrutar de la arquitectura de las casas y los edificios es un deleite. Sin embargo, reúne una serie de elementos que lo distinguen de otros espacios similares a este en la ciudad: la parroquia de San Juan Bautista, la plaza Hidalgo, con su fuente con estatuas de coyotes, el kiosco; los restaurantes, cafés, librerías y heladerías en las calles aledañas, los centros culturales… Y si hiciera falta un pretexto para visitar este lugar, la Feria Internacional del Libro de Coyoacán 2024 nos lo ofrece.

Precisamente en la plaza Hidalgo es que se dio el espacio para la tercera edición de esta feria. Se montaron carpas para dar espacio a 180 expositores (editores, librerías y proyectos independientes), así como conferencias, mesas de diálogo, conversatorios, presentaciones de libros y talleres. La diversidad de los talleres iba desde el origami, pasando por acuarela y dibujo, hasta encuadernación, máscaras de papel y cartonería. Otras actividades a las que se les dio espacio fue a cuentacuentos, conciertos, presentaciones de danza y lecturas dramatizadas. Todas estas actividades fueron gratuitasy para todo el público.

Como invitados a esta Feria estuvo el Estado de Guanajuato con su proyecto editorial que busca dar cabida a diferentes voces y diversas propuestas bajo la dirección del Instituto Estatal de Cultura de Guanajuato y de su sello editorial Ediciones La Rana; de igual forma se invitó a la Francofonía. No obstante, por cuestiones de agendas políticas en el país, la colaboración que se hizo se llevó a cabo en enero, siendo una reunión con los representantes de las Embajadas de Francia, Canadá, Suiza, Bélgica y Haití en la cual, además de celebrarse la cultura y las artes de la francofonía en Coyoacán, se hizo una lectura del libro El gallo y la serpiente. En este título, se reunieron una serie de poemas que buscan presentar un poco de la poesía francesa actual a México, haciendo además una analogía entre los símbolos del gallo (Francia) y la serpiente (México).

Entre los expositores, Mango Manila Editorial se hizo presente con una estrategia simple, pero efectiva: colocaron mesas y sillas infantiles, con libros a la estatura de un infante, pues es precisamente a ellos a quienes está dirigido su material. Pensando también en los niños y con el afán de interesarlos en el periodismo, el periódico La Crónica coordinó una actividad en la cual se les prestaban chalecos y micrófonos a los niños para que entrevistasen a los exponentes. Igualmente, para asistentes de cualquier edad, contaban con una actividad más sencilla, pero igualmente llamativa: fotografiarlos e imprimir la foto en la primera plana de un ejemplar del periódico.

La Cartonera también encontró su espacio en la carpa de Espacio M, quienes se dedican al libro de artista, libro objeto y ediciones autogestivas. Los títulos que ofrece La Cartonera son tan variados como sus autores, se enfocan principalmente en poesía, novela, cuento y algunas traducciones, teniendo la particularidad de ser, precisamente, encuadernados artesanalmente en cartón, con portadas pintadas a mano –lo que le concede una identidad exclusiva a cada ejemplar– y tirajes generalmente cortos, por lo que cada uno de los ejemplares tiene un valor único. Fue en esta misma carpa donde se llevó a cabo la actividad de estampado ex libris con sellos grabados por Pedro de Jesús, quien llevó su trabajo desde Cuernavaca para compartirlo en la Feria.

Probablemente la semana asignada para visitar esta Feria sea poco tiempo considerando todas las actividades, sin embargo promete realizarse de manera anual. Así que esperamos que sigan trayendo al público muchas más actividades, charlas, conciertos, lecturas y talleres, pero sobre todo, libros.

Inkitt: BbyKevs
Wattpad: @SugoiKevs
TikTok: @bbykevs

Movimiento Zapatista

“Aprendizajes del movimiento zapatista: de la insurgencia armada a la autonomía popular” – Lia Pinheiro Barbosa y Peter Michael Rosset

Considerar a México como destino turístico siempre es una buena decisión, tiene playas hermosas, cenotes, bosques, pueblos, ruinas de civilizaciones antiguas, una gastronomía exquisita y la gente siempre recibe bien a los turistas. Por otro lado, vivir en la Ciudad de México es una experiencia que recomendaría ampliamente, existe una mezcla de folklor, color, tradición junto a la modernidad de los avances tecnológicos a nivel global. En esta ciudad hay muchas ofertas culturales y artísticas, hay muchos lugares turísticos y acceso a la educación. Sin embargo, estas dos visiones son un sesgo que se ha generado, quizá porque tendemos a ver el vaso medio lleno. Pero la realidad de quienes viven en la periferia de la ciudad y de quienes viven en provincia —no tan alejados de los centros turísticos principales—, es muy distinta.

Este movimiento da comienzo la noche del 1 de enero de 1994, cuando el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) hizo un levantamiento armado en San Cristóbal de las Casas ofreciendo la lectura de la Primera Declaración de la Selva: once demandas: trabajo, tierra, techo, alimentación, salud, educación, independencia, libertad, democracia, justicia y paz. En síntesis, lo que se exigía era tan sencillo como fundamental: derechos. Estos derechos a los cuales, por el mero hecho de ser mexicanos, ya tenían garantía por medio de las leyes establecidas en la Constitución de 1917 , pero que, con el paso de las décadas, se les había privado de ellos o, directamente se les habían negado. ¿Quiénes se los negaron? ¿Quiénes relegaron a las comunidades indígenas? El gobierno podría fácilmente ser responsable en parte de ello por no contar con los medios para garantizar el ejercicio pleno de sus derechos brindándoles caminos y escuelas con material didáctico adecuado, instaurando centros de trabajo con jornadas laborales y salarios dignos, que a su vez les permitieran acceder a viviendas con servicios de agua, drenaje y luz, así como alimento y vestido. No obstante, en esta compleja situación, queda por nombrar a otro actor: el resto de la sociedad.

La sociedad moderna que adoptó las costumbres de los conquistadores, vive en las ciudades, habla español y entró en el sistema que proponía al neoliberalismo como modelo económico -sistema que, indirectamente, propició el movimiento del EZLN-. Porque, si bien es una sociedad con muchas carencias y problemáticas a resolver, no es equiparable a la situación de precariedad de la mayoría de los indígenas en México. Aunque todos somos mexicanos, las oportunidades y los contextos no son los mismos: a las comunidades indígenas se les ha aislado y discriminado muchas veces por mantener sus costumbres y tradiciones, llegando a verlos como los otros. Así pues, se ha creado una separación que no ha hecho otra cosa que abrir más la brecha cultural, económica y política, decantándose en el movimiento indígena-campesino. Este movimiento ha tenido fallas, como cualquier autonomía, pero ha mantenido una lucha legítima en el aspecto social y, a su vez, ha inspirado a más manifestaciones del mismo tipo.

El Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales pone a disposición de las y los lectores una colección de libros que, en clave de difusión, se propone dar cuenta de los principales movimientos, revueltas y conflictos de la América Latina y el Caribe del siglo XXI. Entre ellos, se encuentra este título, donde los autores exponen cómo, a tres décadas de sus inicios, el zapatismo ofrece la más completa, explícita y radical versión de autonomía indígena-campesina conocida en el mundo contemporáneo; convirtiéndose así en una lectura clave para comprender el contexto actual de los países del centro-sur de América.

Inkitt: BbyKevs
Wattpad: @SugoiKevs
TikTok: @bbykevs

Kermés “Editando lo cotidiano”

En la azotea del Museo UNAM Hoy se llevó a cabo el sábado 13 de abril la cuarta edición de la kermés “Editando lo cotidiano”, que aunque suene fuera de lo común, es precisamente eso: una kermés. En la entrada del museo colocaron un stand donde la gente podía acercarse a sellarse grabados sobre la piel a manera de tatuaje, funcionando como una invitación para subir a la kermés, que se realizó en la azotea. Entrando a la azotea se ofreció una recepción con agua de jamaica y tacos de canasta, explicaban la dinámica del evento, daban billetes denominados “churru-pesos” que eran canjeables por actividades en los stands o por artículos que tuvieran en venta y, básicamente, daban así la bienvenida. Los realizadores de este evento son 10 colectivos editores autogestivos que buscan dar a conocer su trabajo como creadores de fanzines, pero además, abren un espacio en donde buscan dar la bienvenida a conocedores y no conocedores de su trabajo.

En México hay momentos del año donde, para conmemorar alguna fecha especial como el día de la independencia y el día de las madres, las escuelas organizan eventos llamados “kermés”, los cuales se tratan de convivir con los compañeros de clases mediante juegos, actividades y al momento de compartir alimentos. Tomaba un plus cuando se permitía llevar ropa de diario y no el uniforme, lo cual le daba un toque más atractivo. Así pues, la kermés era el momento más “punk” del año. Para estos realizadores de fanzines, quienes saben que el inicio del fanzine está en lo punk,  retoman estos dos conceptos para crear “Editando lo cotidiano”.

El hecho de ser una kermés no es una casualidad, es una idea trabajada por La Zinería y Editorial Mitote, en donde invitan a compañeros del gremio con quienes ellos se han encontrado a lo largo de su recorrido en la edición y publicación. Este camino ha sido principalmente entre bazares y ciertos eventos culturales donde, ya en la convivencia, comentaban que no se abren espacios exclusivamente para ellos, para su trabajo como editores de fanzines y de publicaciones independientes. Así que, al no encontrar un lugar en ferias del libro o recintos que abran sus puertas, los mismos colectivos se organizan y buscan sus propios lugares de encuentro y exposición.

La oferta artística que llevaron fue desde los fanzines a grabados, ilustraciones, pósters, figuras en periódico, pintadas y cubiertas con resina epóxica. Como extensión, también se dieron charlas, talleres y lecturas en voz en una sala inferior de donde se realizaba la kermés. Me encontré con títulos como “Cómo romper el corazón de un elefante”, de Brian O’ Brien, en donde se narra cómo los elefantes son secuestrados y separados de su manada para ser entrenados y vendidos a zoológicos o circos; Larissa Alcántara tenía “¿A qué velocidad viaja el pasado que siempre nos alcanza?” donde habla sobre el consumo de las drogas en la adolescencia, envolviendo el fanzine dentro de una bolsita de plástico junto a stickers coloridos, pequeños dulces y cuentas de pulseras que emulan pastillas, logrando así una analogía de cómo son empaquetadas y presentadas las drogas; Baruck Racine realizó un fanzine fotográfico donde cuenta a través de imágenes su vida en EUA durante su infancia, su vida en México y cómo la frontera que separa a ambos países no es sólo física. Asimismo, la Fanzinoteca de la UNAM prestó material para su exhibición, el cual forma parte de su catálogo que puede ser consultado en cualquier momento en su centro archivístico.

La idea principal de estos colectivos, además de presentar su trabajo, es crear espacios y consolidar comunidades, pues encuentran fundamental romper la estigmatización de cómo debe ser el arte y para quién va el arte. Esta particular visión nace pues los creadores han encontrado en sus comunidades de origen que bien llaman “la periferia” -Xochimilco, Ecatepec, Cuautla, Tláhuac, Morelos, Tlalnepantla-, poca apertura a la expresión gráfica y artística que realizan. Pocos espacios se han arriesgado en las ediciones anteriores de esta kermés a abrir sus puertas y, más aún, a financiarlos. Así que, sumando esfuerzos entre colectivos, prepararon una invitación abierta a todo público, un evento en donde los niños también son bienvenidos, ofreciendo a las infancias la oportunidad de acercarse a este mundo, para mostrarles que hay gente que vive de “hacer dibujitos”.

@yolitzin_amantolli

@larissadeltiempo

@___existo___

Inkitt: BbyKevs
Wattpad: @SugoiKevs
TikTok: @bbykevs

Fiesta del Libro y la Rosa 2024

Del viernes 21 al domingo 23 de abril y a lo largo de 3 sedes, se presentó la Fiesta del Libro y la Rosa 2024 en la Ciudad de México. Se convocaron a más de 220 editoriales y se montaron más de 7 foros de pláticas, presentaciones de libros y conversatorios, además de ofrecer talleres, conciertos y obras de teatro, eventos completamente gratuitos y abiertos a todo público. Entre los numerosos stands, las actividades y el hecho de estar dividido entre el Centro Cultural Universitario, el Centro Cultural Universitario Tlatelolco y el Museo del Chopo, resultaba imposible dividirse para poder abarcarlo todo. Sin embargo, como las cosas dulces, vale la pena tomar un poco de todo para lograr degustar.


En la explanada del Centro Cultural Universitario se montó una carpa que cubría 83 de los más de 145 stands disponibles, los demás estuvieron acomodados enfrente del teatro Juan Ruíz de Alarcón y el foro Sor Juana Inés de la Cruz, y camino al estacionamiento del área de teatros. Cabe mencionar que Teatro UNAM también tuvo su participación en este evento al montar el Carro de Comedias al fondo de la feria, ofreciendo funciones abiertas al público. Entre los stands de libros también se montaron 7 carpas de charlas, 2 carpas de talleres y una cabina de Radio UNAM que tenía un amplificador apuntando hacia afuera para escuchar el programa que se hacía dentro, donde se realizaban entrevistas a autores invitados.


La UNAM dedicó espacios a algunas de sus facultades y entidades, como a la Filmoteca de la UNAM, que presentó su material tanto de textos de investigación como DVDs de películas nacionales e internacionales; al igual que Ciencia UNAM contó con un stand dedicado a sus publicaciones en formato de revistas de divulgación. También había varias facultades de la como la Facultad de Facultad de Arte y Diseño, que mostraba su catálogo de libros acerca de diseño, la de Filosofía y Letras estaba representadas por su Colegio de Filología y el Colegio de Filosofía. Entre muchos otros, el stand más grande y llamativo fue el de Libros UNAM, el cual tenía entre sus títulos “Monstrua: Antología de 10 escritoras mexicanas”, que pese a haber salido hace un par de años, se mantiene relevante y atractivo debido a la propuesta narrativa que recoge en sus páginas. En esa misma corriente de dar voz a las mujeres, “Mujeres insurgentes de los años 70: Género y lucha armada” también se encontraba entre los libreros, manteniéndose como una investigación esencial que merece la pena tener presente para la comprensión de nuestra historia.

Si bien entre las editoriales participantes se encontraba “Leetra”, que está especializada en libros para niños y llevaba materiales muy llamativos para los infantes, así como un espacio para que pudieran acercarse a interactuar con los libros, ése fue el riesgo más grande que se tomó en en CCU. Mientras tanto, las otras dos sedes de la Fiesta tomaron una línea distinta, más abierta a propuestas independientes y de contenidos alternativos.

En el Museo del Chopo abundaron stands llenos de fanzines, ilustraciones, cuadros, libros-arte y libros de segunda mano, dando así una amplia oferta para quienes buscan algo más que los libros convencionales. De la misma forma, el museo brindó un espacio para presentación de libros, con la particularidad de tener a los ponentes y a los asistentes al mismo nivel de piso y a una distancia muy corta, brindándoles así una sensación de más intimidad.

El balance perfecto entre estas dos recintos fue el Centro Cultural Tlatelolco, que cedió el salón Juárez para que se presentaran más de 50 editoriales entre las que se encontraban libros convencionales, libros infantiles, fanzines, ilustraciones, cómics, libros de segunda mano y libros-arte. Las propuestas eran muy variadas, ofreciendo títulos para todos los gustos y edades, logrando así una muy buena combinación entre lo “convencional” y lo “alternativo”, tomando lo mejor de dos mundos. Aún así, independientemente de la sede a la que uno decidiera acudir, todos los espacios eran buena opción para visitar; así como lo son el resto del año, pues entre las exposiciones permanentes de los museos, las temporales, la cartelera teatral y los talleres, la Fiesta del Libro y la Rosa, sólo es una probada de toda la oferta cultural de la UNAM.

Inkitt: BbyKevs
Wattpad: @SugoiKevs
TikTok: @bbykevs

“Monstrua” – Brenda Lozano y Gabriela Jauregui (coordinadoras)


Al momento de hablar sobre la literatura a lo largo de la historia, surgen nombres en cualquiera de las corrientes que han habido. Podemos reconocer con facilidad a todos los griegos en la creación de la dramaturgia clásica, a Edgar Allan Poe estableciendo las pautas para la estructura del cuento contemporáneo en el romanticismo, a Oscar Wilde inaugurando su propia corriente de esteticismo… Y los ejemplos pueden continuar. Sería muy fácil decir que la literatura ha sido un terreno exclusivamente de los hombres, no obstante, eso no sería verdad.

Las mujeres han participado activamente en la creación de literatura en todos sus géneros. Sin embargo, debemos remitirnos a los hechos, el camino que siguieron no fue el mismo. Conseguir ser tomadas en serio, ser publicadas y reconocidas como escritoras fue una lucha que tuvieron que hacer las mujeres, al igual que en cualquier otro ámbito de la sociedad ―fuera de los roles de madres y cuidadoras del hogar―. En realidad, fue hasta hace relativamente poco tiempo cuando las mujeres entraron con toda sus fuerzas en el mundo de la literatura. Incluso en este punto, nos encontramos con más trabas, pues como bien lo planteó Virginia Woolf: escriben las mujeres que tienen una habitación propia.


Las mujeres en general viven en sociedades donde el mayor éxito al que pueden aspirar es conseguir un buen marido, dedicarse a sus familias y a sus casas. Quizás, en los últimos tiempos, sea posible también aspirar a un trabajo, siempre y cuando éste no quite demasiado tiempo como para “descuidar” a la familia. Podría parecer que esta forma de vida es un estereotipo, pero no, es una realidad. Cuestiones como decidir dedicarse a sus carreras, buscar su independencia, escribir… se convierten en actos de rebeldía. Se convierten en cosas fuera de la cotidianeidad, en algo extraño e incluso ajeno. Como los monstruos.


El monstruo creado por Mary Shelley en Frankenstein, alcanza una revelación en algún momento y es la de perder el miedo y adquirir poder a través de eso. Y eso es lo que ocurre de alguna forma en este libro. La antología “Monstrua” nos habla de cómo las autoras pierden el miedo de sí mismas y a las represalias sociales, y escriben. El término que las coordinadoras eligen es monstrua y no monstruo porque, retomando a Rosario Castellanos, hasta hacer esa distinción es importante: se trata de algo femenino. Son las mujeres mostrándose, pronunciándose, escribiendo.

Esta antología ofrece textos creados por mujeres jóvenes que vienen de distintas partes de México, de distintos contextos, comunidades y lenguas, trabajando distintos géneros como poesía, cuento, ensayo y hasta guión radiofónico. Además de esto, algunas de las autoras presentan sus textos en sus lenguas originarias, contando también con su traducción al español. Algunos de los textos van acompañados por fotografías que, no sólo acompañan, sino que suman al ambiente que crea el texto, lo enriquecen y lo vuelven más íntimo. Así pues, los lectores nos encontramos con una propuesta llena de diversidad, experimentación y originalidad.


El trabajo que realizan Brenda Lozano y Gabriela Jauregui como coordinadoras, no sólo es dedicado y bello, sino necesario. Es importante que las mujeres jóvenes vean que lo que ellas tienen por decir, importa, y que hay medios y personas que buscarán la manera de ayudarlas a que su voz sea escuchada. Este tipo de publicaciones son las que hacen la diferencia en el mundo literario, pues presentan material significativo, recopilado incluso de los lugares más remotos del país, demostrando que aún hay mucho más que descubrir.

Inkitt: BbyKevs
Wattpad: @SugoiKevs
TikTok: @bbykevs

El mundo del Fanzine

En la vida de un lector uno se puede encontrar con toda clase y variedad de lecturas. Libros, revistas, blogs y plataformas digitales son los formatos más comunes, los que están más a la mano. Sin embargo hay un formato que vive, por lo general, en el mundo underground de la lectura: el fanzine.

Que sea under no significa que el fanzine sea algo que de pronto está emergiendo, en realidad su origen se puede rastrear hacia finales del siglo XIX, con el surgimiento de auto-publicaciones de ficción. A través de los años el fanzine ha adquirido tintes diversos, inclinándose en los años treinta más hacia lo artístico o la ciencia ficción, teniendo un parecido al formato de cómic. En algún momento de los años sesenta, los fanzines dieron un giro hacia lo político y la protesta, incluso tocando temas tabús y de contracultura.

Hacia los años noventas, con el acceso a las computadoras y el internet, los fanzines pasaron también a estar en medios electrónicos, consiguiendo el término “ezine” o “e-zine”. Este salto se hizo con la intención de atraer más lectores, abaratando al mismo tiempo costes de difusión. Al principio se distribuyeron como documentos en formato PDF, para después adoptar un formato web y ser revistas electrónicas no imprimibles. Este momento en la vida del fanzine es más que nada una bifurcación, pues actualmente se siguen produciendo fanzines de manera tanto física como digital.

El fanzine no es exclusivo ni excluyente de ningún tema. Partimos de la premisa de que su término es una combinación de palabras entre fan (aficionado) y magazine (revista), lo que abre el panorama a que cualquiera con el interés en algún tema y en escribir pueda crear un fanzine. Desde sus inicios, fueron publicaciones realizadas por fans en torno a algún tema (como música, deportes, literatura, cine, cómics). El hecho de ser realizados por fans y no contar con patrocinios o presupuesto, orilla a los creadores a realizar sus producciones de forma casera. Aunque pudiera parecer una desventaja, en realidad ofrece a sus creadores total libertad de expresión, sin ataduras económicas ni de ningún tipo a intereses de terceros.

La creatividad es el límite al momento de crear un fanzine. Se pueden realizar únicamente con textos, o combinarlos con imágenes, hacerlos únicamente con imágenes, recortes o collages, combinando papeles, darles cualquier forma. La difusión puede ser mediante impresiones, fotocopias y documentos digitales PDF, por lo general. Los temas pueden ser tan variados como sus creadores, quienes suelen ser especialistas en el tema que exponen, sin necesitar ser reconocidos como profesionales, reconociendo más su trabajo que su prestigio. Así pues, la verdadera esencia del fanzine es esa: ser artesanal.

En la actualidad se han creado los “prozines”, que son, a diferencia de los fanzines, producciones realizadas con medios profesionales. Es decir, retoman todos los conceptos iniciales del fanzines: la libertad de expresión y la libertad creativa, sin embargo son autoeditados por creadores que pretenden vivir de su trabajo creativo. Con este fin, sus impresiones son de más calidad, cuentan con correctores de estilo y revisión de profesionales para mejorar sus trabajos. Personalmente, encuentro que el prozine no es necesariamente competencia del fanzine, pues sus objetivos son distintos y la existencia de uno no demerita ni complica la del otro.

Los fanzines surgieron más que nada como una necesidad de sus creadores por tener una voz en un entorno donde era difícil ser escuchado, en especial si se tenían opiniones distintas a las de la época (siendo estas políticas, morales o de cualquier otra índole). El formato, forma y contenido son tan diversas y extensas como sus creadores, ofreciendo una amplia gama de producciones. Fueron y son necesarios si como escritor, fotógrafo o artista gráfico, se busca dar a conocer su trabajo o, simplemente, atendiendo a ese impulso humano de expresar, de hablar y ser escuchado.

https://www.historiasparaarmar.org/contar/proyectos/15-un-fanzine-sobre-tu-historia

https://www.domestika.org/es/blog/2955-que-es-un-fanzine

https://www.monmagan.com/fanzines/

Inkitt: BbyKevs
Wattpad: @SugoiKevs
TikTok: @bbykevs

“Antología” – Lambert Schlechter

“La Cartonera, editorial independiente, artística y artesanal, publica libros con portadas hechas con cartón recolectado en las calles de Cuernavaca, Morelos en México. Cada uno de nuestros ejemplares es una experiencia única pues, además de buena literatura, cada una de las portadas es pintada por un artista en nuestros talleres colectivos”, es el encabezado de la página web de La Cartonera. Esta editorial es todo un concepto en sí misma: es independiente, no recibe apoyo de ninguna institución, trabaja de manera artesanal y sin fines de lucro. Es, en suma, un trabajo artístico que emerge contra corriente en un contexto donde los libros parecen ser piedras preciosas cada vez más escasas, pero no por ello menos valiosas.

Esta editorial tiene además, un profundo interés en llevar títulos poco convencionales, como “Contagio Cartonero: Creación en tiempo de pandemia”. En ese libro se integró un comité organizador de México,  Colombia, Perú y Venezuela, se reunieron fotografías, ilustraciones y textos de más de 40 participantes de edades preescolares hasta adultas. Desde Argentina, Colombia, Bogotá, México y Venezuela se reunieron propuestas artísticas como ilustraciones, dibujos, poemas y cuentos que pretendían responder a la creciente necesidad de unidad y supervivencia de frente a la pandemia y combatir de ese modo a la incertidumbre y miedo del momento.

Entre esos títulos hay uno que me cautivó por sus colores y su formato, pero sobre todo por su contenido, pues al hojearlo encontré que La Cartonera fue la primera editorial en publicar a este autor luxemburgués al español, en México. Además, esta edición es bilingüe español-francés, confrontando los textos de frente, permitiendo encontrar más genuinidad y profundidad al conocer las palabras originales que se traducen. Se trata de un tiraje de únicamente 150 ejemplares, que presenta una antología de poemas y cartas de Lambert Schlechter, quien es un filósofo y escritor de poesía, novela y ensayo, que se ha dedicado desde principios de los años 80 a su labor como escritor, y que, además, fue nombrado Caballero de las Artes y las Letras en 2001.

Aunque estos poemas y cartas son extraídos de otros títulos del autor, la selección realizada por la editorial es tan buena que todos los poemas parecen entretejidos y ofrecen una lectura consistente. No obstante, hay otro detalle que encuentro en estos poemas: el escritor escribe sobre el hecho de ser escritor. No muchos hacen eso, a veces pareciera que los mismos autores tratan de tomar distancia de sus trabajos; como si sólo se estuviesen preocupando por lo que la gente o los críticos van a decir sobre su obra. Aprecio cuando los autores son honestos consigo mismos, con lo que están escribiendo, se siente auténtico. Así que, en pocas palabras, encuentro a Lambert Schlechter, como poeta, tremendamente auténtico y honesto. Las cartas intercaladas con los poemas sólo refuerzan esto, agregando, en todo caso, más complejidad y riqueza a la poesía.

Los temas que Schlechter toca en sus trabajos literarios son diversos, lo cual hace mucho sentido al hacer cuentas y encontrarnos con que han sido más de 35 años de carrera; sin embargo se pueden encontrar tópicos universales como la percepción del paso del tiempo, el deseo, la complejidad de la vida y la muerte, la naturaleza, el erotismo, la cotidianeidad. Personalmente, encuentro fascinante cuando los poetas hablan sobre lo que conocen, lo que les rodea; nos permite no sólo entender más su vida, sino conocer su perspectiva de la misma, distinguir sus opiniones, percepciones, conflictos… Y darnos cuenta, que aunque seamos de distintos entornos, extractos sociales, generaciones y géneros, hay cosas intrínsecas que nos unen como seres humanos.

Inkitt: BbyKevs

Wattpad: @SugoiKevs

TikTok: @bbykevs